Internet de las cosas, objetos inteligentes y otras fantasías
Desde que el término Internet Of Things (IoT para los amigos) se acuño en el año 2009 en la conocida conferencia de P&G por Kevin Ashton [1] ha rodado mucha tinta (y papel) sobre lo que es y sobre todo, lo que no es.
Para ir directo al grano, IoT es la conjunción y evolución de las tecnologías M2M [2] y WSN [3], aderezado con las bondades que ofrece TCP/IP y la Web. Esencialmente, un dispositivo de IoT es un aparato electrónico centrado en un microprocesador (o microcontrolador) con acceso a diversos sensores y/o actuadores, y con facilidades de comunicaciones hacia el exterior mediante el uso de algún medio de acceso, ya sea directo o indirecto, a la Internet.